Lun. Oct 6th, 2025

La repostería es un arte donde los pequeños detalles hacen toda la diferencia. Muchas veces creemos que basta con seguir la receta al pie de la letra, pero la verdad es que existen ciertos secretos que los reposteros conocen y que pueden llevar tus postres de “ricos” a “¡wow, necesito repetir!”.

Aquí te comparto 5 tips que transformarán tus preparaciones:


1. No abras el horno antes de tiempo 🚪🔥

La ansiedad nos gana, lo sé: ver cómo sube un bizcocho es casi hipnótico. Pero abrir el horno antes de la mitad del horneado es un error fatal. El cambio brusco de temperatura hace que tus bizcochos o soufflés se bajen y pierdan esponjosidad. La paciencia, aquí, es el ingrediente secreto.


2. Deja reposar la masa en la refrigeradora ❄️🍪

Cuando prepares galletas o masas quebradas, déjalas descansar en frío durante algunas horas (o incluso toda una noche). Este paso intensifica los sabores y mejora la textura, logrando galletas más crocantes y masas más firmes que se deshacen en la boca.


3. Usa sal en postres dulces 🧂🍫

Parece contradictorio, pero una pizca de sal puede ser tu mejor aliada en repostería. Añádela a masas, cremas o incluso al chocolate: verás cómo potencia los sabores dulces y evita que resulten empalagosos. La sal es el amplificador natural del sabor.


4. Enfría antes de cortar 🧊🔪

El momento de sacar un brownie o bizcocho del horno es pura tentación. Pero cortar de inmediato puede arruinar la presentación: se desmoronan, se pegan o pierden forma. Si los dejas enfriar, obtendrás cortes limpios y postres con aspecto profesional.


5. Controla la humedad del horno 💧🍮

Un truco poco conocido: coloca un pequeño recipiente con agua dentro del horno al hornear bizcochos o cheesecakes. El vapor evitará que la masa se reseque, dará una textura más tierna y prevendrá las molestas grietas en la superficie.